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Cultivo bajo sombra Producción de yerba mate con araucarias busca reconocimiento de la ONU

La producción de yerba mate en Paraná, Brasil, entró en el radar de la ONU y puede beneficiar a los productores.
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A fines de 2021, representantes de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO: Food and Agriculture Organization) visitaron distintos establecimientos yerbateros en el Estado de Paraná, al sur de Brasil, límite con Misiones, Argentina.

¿Qué interés en la yerba tiene la ONU? Los árboles. Evelyn Nimmo, presidenta del Centro de Desarrollo y Educación de Sistemas Tradicionales de Yerba Mate (CEDerva), es una de las artífices del proyecto que busca que el Sistema tradicional de producción de yerba mate sea declarado por la ONU como Sistemas Importantes del Patrimonio Agropecuario Mundial (SIPAM).

Actualmente, la FAO reconoce sólo 62 sistemas agrícolas en 22 países de los que sólo cuatro están en América del Sur y Brasil tiene, de momento, 1 solo.

Mantener las tradiciones y adoptar prácticas de preservación ambiental

La FAO busca modelos ejemplares que puedan combinar la producción agrícola con el mantenimiento de las tradiciones culturales, la valorización social de los saberes populares y las técnicas de producción, así como la adopción de prácticas de preservación ambiental, también cuentan con los evaluadores.

Para Nimmo, las propiedades visitadas en Irati, São João do Triunfo y São Mateus do Sul tienen, si no todas, muchas de las características buscadas por los representantes de la ONU.

Distintos sistemas de producción de yerba mate con araucarias, encontrados en las propiedades de productores de la agricultura familiar

“Mucha investigación y mucho trabajo que ya se ha realizado ha demostrado que existe un vínculo muy fuerte entre los sistemas tradicionales de producción de yerba mate y los bosques de araucaria”, dijo Nimmo en una entrevista publicada en Gazeta do Povo.

“La yerba mate no es una planta que le guste estar a pleno sol; le gusta el bosque. El sistema integra todo el bosque, y esto es muy importante no solo para las plantas, sino para toda la región.

«Hay muchas ganancias ambientales, como la conservación de los manantiales, la protección del agua, el aire más limpio”, dijo.

La yerba mate de sombra paranaense es única en el mundo

“Nelson Dias da Silva es agricultor en São João do Triunfo y está orgulloso de cultivar yerba mate de la misma manera que siempre lo hicieron sus bisabuelos”, publicó Gazeta do Povo. “La finca, de 3 fanegas, es tratada por él como un espacio más que especial. “Nuestra región tiene una característica única en todo el planeta”, aseguró el productor.

“No hay nada igual en ninguna otra región del mundo, ni siquiera en Santa Catarina, Rio Grande do Sul, Paraguay, Uruguay o incluso Argentina”, dijo.

Nuestra yerba mate producida en sistema de sombra de bosque nativo tiene una diferencia de calidad que se percibe en el paladar. Las plantas de yerba más grandes de Rio Grande do Sul vienen a nuestra región a comprar nuestra yerba para mezclarla con la de ellos, que se produce en yerbas al aire libre.

La suavidad de nuestra yerba mate producida en el sistema tradicional no se encuentra en ningún otro lugar del mundo. La diferencia es muy grande”, aseguró el productor.

Según Nimmo, al frente de CEDErva, todos los productores de yerba mate visitados pudieron mostrar a los representantes de la FAO el sistema tradicional presente en Paraná. “Valoran la biodiversidad, el cultivo en el bosque, la preservación de todo el medio ambiente y todo el valor cultural que hay detrás del sistema productivo. Está toda esta preocupación por la cultura, por las tradiciones, no es una simple plantación. Creo que logramos mostrar el verdadero cariño que tiene esta gente con todo este sistema y, sobre todo, con la yerba mate misma”, informó.

Los beneficios del sello:

El reconocimiento del Sistema Paranaense de producción de yerba mate en bosques de araucaria por parte de la ONU puede traer más que orgullo a los productores del estado. Según el presidente de CEDerva, hay dos ganancias principales con la certificación.

Uno de ellos es económico. “Nuestra meta es que estos productores tengan más autonomía y más valor, mayor retorno económico cuando vendan sus productos”, dijo Evelyn.

“La yerba mate que se produce en el modelo agroecológico es diferente a la que se saca de plantas que se dejan a pleno sol. La calidad es mucho mayor. Este reconocimiento puede abrir las puertas de mercados más exigentes, nichos de mercado, para estos productores tradicionales”, evaluó.

El otro beneficio es el reconocimiento cultural: El agricultor Nelson Dias da Silva explicó cómo se puede “aprovechar” el reconocimiento de la FAO, que tiene sus restricciones para uso comercial. “No podremos utilizar, por ejemplo, un sello que indique este reconocimiento en nuestros productos”, explicó. “La propia normativa de la FAO no permite este tipo de explotación.

Lo que pasa es que la ONU reconoce el sistema como patrimonio de la humanidad. Esto traerá un reconocimiento cultural, y los territorios donde existen estos sistemas reconocidos pueden beneficiarse en otros sectores como el turismo rural”, detalló.

Fuente: gazetadopovo.com.br

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