Todo un ritual Cosas que no debes hacer cuando preparas un mate argentino

Infusión nacional, el mate es todo un icono argentino y parte de las tradiciones que se consume en todo el país y en todas las clases sociales.

Como todo elemento cultural tiene su ceremonia y pasos a respetar. Vemos los más importantes.

• No mezclar la yerba: un error frecuente es colocar la yerba dentro del mate sin antes mezclarla; los materos expertos aconsejan vaciar el paquete hasta la mitad y mezclar cada parte por separado para que el polvo, hojas y palos se distribuyan de manera pareja y equilibren el sabor.
• Comenzar con agua muy caliente: los mates se comienzan a preparar con agua tibia, el agua caliente o hervida hace que la yerba se «queme» y se pierda sabor. La clave está en ir aumentando gradualmente la temperatura y testeando si el agua se acerca a la» temperatura mate»: cuando llega a unos 75/80 °C es el momento de apagar la hornalla o la hervidora.

• Servir mates lavados: esto sucede cuando la «montañita» (la parte de yerba que debe permanecer seca) se moja y los mates ya no tienen más sabor. Hay que evitar mojar toda la yerba, siempre verter poca agua y bien cerca de la bombilla: así la montañita dura un poco más. Cuando la yerba está toda mojada, es el momento de vaciar el mate y llenarlo con yerba nueva y preparar otra vez el mate, paso a paso.
• Invitar mates fríos: cuando dejamos de servir agua dentro del recipiente, la yerba se enfría y los mates se vuelven muy amargos. Por eso, no hay que dejar de servir.
• Mover la bombilla: si nos invitan un mate, nunca hay que tocar la bombilla. Puede ser ofensivo para la persona que preparó el mate, porque si lo hacemos estamos «desarmando» el mate.
• Inevitable: La montañita que el cebador preparó con tanto esmero, va a derrumbarse y la yerba seca se va a mezclar con la mojada. Si la bombilla está torcida, es mejor dejar al cebador que la acomode.

Estos trucos van a ayudarte a preparar y tomar los mates más ricos, puedes tomarlo solo o con amigos.